Dos partidas muy reñidas de bolos donde lo importante no era ganar, era conversar y disfrutar de la compañía de unos y otros. Esta tarde de ocio inclusivo les ayudó a aumentar su autoestima, porque si a nivel físico la movilidad conseguida es muy buena, también lo es a nivel emocional. «Ellos disfrutan como nadie», nos contó Teresa, madre de Jorge, y tiene razón saben coger lo mejor de cada momento y nos hacen mejores (valga la redundancia) a todos los que estamos a su lado. Y, aunque no hay competición, nuestros chicos y chicas son muy buenos y tenemos que contaros que casi todos se fueron habiendo hecho un pleno.
Luego de hacer rodar la bola, nos sentamos todos juntos para dar paso a la comida. No podíamos dejar pasar ese momento juntos para comernos unas ricas hamburguesas entre chistes y anécdotas de todos. Inolvidable.
Y, para terminar, os deseamos lo mejor para el nuevo año. Nosotros nos vamos a pasar la Nochevieja recordando este mensaje tan bonito:
«Muchas gracias por este regalo de fin de año para nuestros chicos. Gracias por el cariño y por el esfuerzo que hacéis siempre para buscar la manera de que nuestros hijos sean cada día más autónomos, integrados y sobre todo felices. Un abrazo para todos y un feliz año 2023»
¡Qué buena manera de terminar el año! Todos estos ánimos, nos harán seguir trabajando para poder vivir muchos más momentos de estos junto a todos vosotros.
Y os desvelamos un pequeño secreto… ¡Todavía nos queda nuestra tarde de espectáculo navideño en Árticus viendo «Peter Pan – On Ice» el día 30 de diciembre! Os seguimos informando…

- Con el apoyo de