Casi veinte años realizando el Camino de Santiago Adaptado de Fundación También y esta ruta de peregrinación nos sigue emocionando kilómetro a kilómetro como el primer día. Más de medio centenar de personas con discapacidad y sin discapacidad, con Irene Villa como madrina, recorrimos 60 kilómetros en diversas bicicletas adaptadas y andando.

¿Nuestro punto de partida? Palas del Rei (Lugo). A pesar de la lluvia, la primera toma de contacto del primer día nos dejó contentísimos. Todos tenían una bicicleta adaptada según sus necesidades y se había formado un equipo que llevaba muy buen ritmo. Solo había que ver las intensas ganas que todos tenían de recorrer la senda repleta de una preciosa naturaleza gallega al tiempo que compartían sus historias y disfrutaban de la hermandad que se estaba labrando entre todos nosotros.
La lluvia nos dio respiro durante la tarde y los tándem, triciclos y hanbikes, para niños y mayores, se abrían paso a pesar de la dificultad del terreno y del barro. ¡Nada como disfrutar del olor a tierra mojada aderezada con el aroma a eucalipto que desprende Galicia!
“Nunca choveu que non escampase”, es un dicho Gallego que nos vino al pelo para nuestro segundo día. No es de extrañar que el astro sol hiciera acto de presencia con tanta sonrisa de participantes, voluntarios de Fundación AON y del equipo técnico de Fundación También.
Con decisión nos adentramos en un recorrido desde Fontelas (A Coruña) hasta Salceda, perteneciente al Concello de O Pino en A Coruña. La empatía llegó a su punto más álgido ese día, ya lo habíamos visto el día anterior y es algo que fomentamos en Fundación También desde los inicios, pero nos llena de orgullo y alegría ver como la inclusión es un hecho en cada una de nuestras actividades. Cómo personas, con y sin discapacidad, unen esfuerzos para solventar, en este caso, cualquier tipo de traba en el camino.
Y es que logramos acabar esta etapa victoriosos gracias a tener todo lo necesario para poder hacer frente a varios pinchazos y alguna que otra salida de cadena. En este punto no podemos olvidar el acompañamiento que realizaron de manera voluntaria el Club ciclista Os do Monte Bravo, que, junto a los voluntarios de Fundación AON y el equipo técnico de Fundación También, pudimos dar un soporte muy importante para el apoyo de nuestros aguerridos peregrinos.
En la tercera jornada, como cada día, un autobús de ALSA nos acercó al punto de salida, al lado de la televisión gallega. Pocas horas después, habiendo hecho nuestra histórica parada en O Monte do Gozo, con el nudo en la garganta y ataviados con chubasqueros para hacer frente al temporal lográbamos traspasar la “Puerta del Peregrino” y divisar con intensa emoción la hermosa Plaza del Obradoiro.
Entre sollozos de alegría y escoltados por la seguridad que nos proporcionaron los voluntarios de Protección Civil de Santiago de Compostela, nos dio igual la lluvia porque los aplausos de la gente que nos dieron la bienvenida nos llenaron de calor el corazón.
Una vez más, en este lugar histórico hemos logrado nuestro desafío, contentísimos de haberlo podido celebrar con la recepción de la Directora General de Personas con Discapacidad de la Consejería de Política Social y Juventud de la Xunta de Galicia, Doña Begoña Abeijón Fernández.
No queremos terminar esta crónica sin dar las gracias a todos los que nos habéis acompañado y a Fundación AON, Fundación Irene Villa y ALSA por acompañarnos y apoyarnos en este viaje tan bonito.

- Con el apoyo de